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La protesta contra el incivismo del Raval se extiende más allá de Ciutat Vella
Vecinos del Poble Sec planean colgar las mismas pancartas que desde el verano exigen "un barrio digno" en el centro histórico de Barcelona
El cabreo vecinal por la degradación de parte del centro histórico de Barcelona desborda ya los límites del distrito de Ciutat Vella.
El desesperado S.O.S lanzado desde decenas de balcones del Raval mediante pancartas con el inapelable y elemental lema "Volem un barri digne" ("Queremos un barrio digno") está a punto de cruzar el Paral·lel para adentrarse en Poble Sec.
La Unión de Asociaciones de Vecinos de este barrio considera que también en sus calles –principalmente en la vía peatonal Blai– se ha producido una ruptura de las normas de civismo y de convivencia que supera los límites tolerables.
Por este motivo, la asociación ya ha empezado a estudiar cómo extender al Poble Sec la campaña de pancartas iniciada hace unos meses en el Raval.
Esta misma semana una asamblea vecinal tomará la última decisión sobre qué pasos de los planteados hasta ahora (pancartas, movilizaciones e incluso -en último extremo- cortar el Paral·lel) se llevarán efectivamente a cabo.
Los vecinos, en cualquier caso, están decididos a tomar medidas para atajar la situación: "Cuando pones una olla a tanta presión, la olla revienta", resume Jordi Bargalló, presidente de la asociación vecinal.
Sin sufrir problemas idénticos a los de sus convecinos de casco antiguo barcelonés, desde la asociación aseguran que los espacios públicos han dejado de ser lugares de encuentro para todo el barrio: hay ruidos y peleas en las calles hasta altas horas de la madrugada que impiden el descanso, las zonas de bares y de discotecas producen actitudes incívicas de jóvenes orinando en la calle, focos localizados de venta de drogas, etc.
El distrito afirma que es una "sensación" que los datos no avalan
La concejal del distrito de Sants Montjuïc (al cual pertenece el barrio del Poble Sec), Imma Moraleda, comprende la preocupación vecinal y reconoce que "este verano ha sido especialmente largo" y que la calle Blai sufre un "uso muy intensivo", pero añade que no hay datos que avalen un aumento de la inseguridad.
La concejal recalca que en los últimos meses se han tomado numerosas medidas para tratar de mitigar lo que ella considera una mera "sensación" por parte de los vecinos.
Así, Moraleda detalla que hay un refuerzo policial diario en la calle Blai entre las 5 de la tarde y la medianoche, que se está siendo "muy riguroso" en la hora de cierre de los bares, que se está "sancionando con más contundencia los temas de incivismo" y que hace unos meses se mejoró el alumbrado de la zona.
Los vecinos señalan la inmigración como una de las causas
La asociación vecinal intenta desmarcar su reivindicación de cualquier tinte racista o xenófobo, pero vincula directamente los problemas del barrio al gran aumento de la inmigración que ha vivido el barrio (la tasa de población extranjera en el conjunto del distrito es de más del 18%).
En la última asamblea vecinal se comentó que "hay demasiado inmigración para que se pueda hacer un trabajo digno de integración", según recuerda Miquel Carrillo, miembro de la asociación. También se apuntó que "en Sudamérica tienen una cultura de la calle distinta".
La concejal de distrito admite que algunos grupos de personas "tienen que aprender" que "hay cosas que no se pueden hacer en la calle", pero asegura que la solución al problema pasa más por los "equipos de gestión de conflictos" y los "educadores de calle" que por "llenar las calles de policías".
http://www.lavanguardia.es/ciudadanos/noticias/20091027/53811874875/la-protesta-contra-el-incivismo-del-raval-se-extiende-mas-alla-de-ciutat-vella-poble-sec-barcelona-s.html
Vecinos del Poble Sec planean colgar las mismas pancartas que desde el verano exigen "un barrio digno" en el centro histórico de Barcelona
El cabreo vecinal por la degradación de parte del centro histórico de Barcelona desborda ya los límites del distrito de Ciutat Vella.
El desesperado S.O.S lanzado desde decenas de balcones del Raval mediante pancartas con el inapelable y elemental lema "Volem un barri digne" ("Queremos un barrio digno") está a punto de cruzar el Paral·lel para adentrarse en Poble Sec.
La Unión de Asociaciones de Vecinos de este barrio considera que también en sus calles –principalmente en la vía peatonal Blai– se ha producido una ruptura de las normas de civismo y de convivencia que supera los límites tolerables.
Por este motivo, la asociación ya ha empezado a estudiar cómo extender al Poble Sec la campaña de pancartas iniciada hace unos meses en el Raval.
Esta misma semana una asamblea vecinal tomará la última decisión sobre qué pasos de los planteados hasta ahora (pancartas, movilizaciones e incluso -en último extremo- cortar el Paral·lel) se llevarán efectivamente a cabo.
Los vecinos, en cualquier caso, están decididos a tomar medidas para atajar la situación: "Cuando pones una olla a tanta presión, la olla revienta", resume Jordi Bargalló, presidente de la asociación vecinal.
Sin sufrir problemas idénticos a los de sus convecinos de casco antiguo barcelonés, desde la asociación aseguran que los espacios públicos han dejado de ser lugares de encuentro para todo el barrio: hay ruidos y peleas en las calles hasta altas horas de la madrugada que impiden el descanso, las zonas de bares y de discotecas producen actitudes incívicas de jóvenes orinando en la calle, focos localizados de venta de drogas, etc.
El distrito afirma que es una "sensación" que los datos no avalan
La concejal del distrito de Sants Montjuïc (al cual pertenece el barrio del Poble Sec), Imma Moraleda, comprende la preocupación vecinal y reconoce que "este verano ha sido especialmente largo" y que la calle Blai sufre un "uso muy intensivo", pero añade que no hay datos que avalen un aumento de la inseguridad.
La concejal recalca que en los últimos meses se han tomado numerosas medidas para tratar de mitigar lo que ella considera una mera "sensación" por parte de los vecinos.
Así, Moraleda detalla que hay un refuerzo policial diario en la calle Blai entre las 5 de la tarde y la medianoche, que se está siendo "muy riguroso" en la hora de cierre de los bares, que se está "sancionando con más contundencia los temas de incivismo" y que hace unos meses se mejoró el alumbrado de la zona.
Los vecinos señalan la inmigración como una de las causas
La asociación vecinal intenta desmarcar su reivindicación de cualquier tinte racista o xenófobo, pero vincula directamente los problemas del barrio al gran aumento de la inmigración que ha vivido el barrio (la tasa de población extranjera en el conjunto del distrito es de más del 18%).
En la última asamblea vecinal se comentó que "hay demasiado inmigración para que se pueda hacer un trabajo digno de integración", según recuerda Miquel Carrillo, miembro de la asociación. También se apuntó que "en Sudamérica tienen una cultura de la calle distinta".
La concejal de distrito admite que algunos grupos de personas "tienen que aprender" que "hay cosas que no se pueden hacer en la calle", pero asegura que la solución al problema pasa más por los "equipos de gestión de conflictos" y los "educadores de calle" que por "llenar las calles de policías".
http://www.lavanguardia.es/ciudadanos/noticias/20091027/53811874875/la-protesta-contra-el-incivismo-del-raval-se-extiende-mas-alla-de-ciutat-vella-poble-sec-barcelona-s.html
