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Se suicida una defensora de los Derechos Humanos bielorrusa

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Albert Reyes

Albert Reyes
Admin

Se suicida una defensora de los Derechos Humanos bielorrusa

Una triste historia tuvo lugar en la víspera del Día Internacional de la Mujer. El 7 de marzo, la defensora de los Derechos Humanos Yana Poliakova, atormentada por los esfuerzo conjuntos del sistema judicial bielorruso, la policía, los cuerpos especiales y los medios de comunicación oficiales, se suicidó. Si un caso así hubiera tenido lugar en cualquier democracia europea, las primeras páginas de los mayores periódicos lo hubieran presentado desde varios ángulos. Sin embargo, en Bielorrusia, la noticia sólo ha circulado en el pequeño circuito de la prensa independiente.
Yana Poliakova era una mujer de 36 años que vivía en la pequeña localidad bielorrusa de Soligorst junto a su anciana madre. Trabajaba para la organización no registrada Asistencia Legal a la Ciudadanía (registrar una organización de ayuda legal en Bielorrusia es algo imposible. Y ser miembro de una organización no registrada es castigado por el Código Penal), colaboraba con otras organizaciones de Derechos Humanos y formaba parte del grupo de militantes por Olga Kazulina en las elecciones legislativas de 2008. Olga es hija de un conocido líder opositor bielorruso encarcelado tras las protestas contra las elecciones presidenciales fraudulentas de 2006.

Cuatro días antes del suicidio, el juzgado del distrito de Soligorsk halló culpable a Poliakova de violación del artículo 400, apartado segundo, del Código Penal (falsificación intencionada de pruebas). Fue culpada de presentar pruebas falsas contra un policía y sentenciada a dos años y medio de libertad restringida cumpliendo la pena en una institución reformante. Sobre todo, fue condenada a pagar un millón de rublos (unos 240 euros) al policía Pugachiov como “compensación por el daño moral”.
En realidad, el agente Pugachiov y otros dos agentes de paisano sin uniforme la habían apaleado en septiembre de 2008, en la sede de la división local del ministerio del Interior. Poliakova se había negado a firmar unos papeles rehusando a coseguir firmas para Olga Kaulina.
Documentó las marcas de los golpes en su cuerpo y se dirigió a la oficina del Fiscal para que investigara al agente por excederse en sus atribuciones. Pero su petición fue rechazada a los diez días ¡Y en cuatro meses iniciaron un proceso criminal contra ella!
A pesar de que el personal médico que la atendió atestiguó que Yana presentaba señales de violencia, el tribunal sólo escuchó a los testigos del lado del policía (lo que resulta una práctica corriente en Bielorrusia cuando hay policías implicados. Otros policías declaran a su favor y el tribunal está siempre de su parte) y emitió una sentencia condenatoria para Yana. A pesar de los numerosos casos en los que la policía se excede en sus funciones, rara vez se inicia un proceso criminal contra agente alguno.

Sin aceptar la decisión del tribunal, Poliakova se dirigía a presentar un queja a la oficina del Fiscal cuando fue atacada por unos desconocidos que la golpearon fuertemente y le hicieron una dura “advertencia” acerca de sus actividades. Después de recibir asistencia médica, se dirigió a la comisaría a presentar una denuncia por el ataque, pero también fue agredida en la comisaría. Además, el personal de emergencias colaboró con la Policía (algo frecuente en Bielorrusia: los sanitarios emiten el diagnóstico que les piden los agentes o niegan la presencia de heridas o pruebas de golpes).
Finalemente, dos días antes del suicidio, el mayor periódico oficial, llamado Bielorrusia Soviética, publicó un artículo sobre Poliakova. Plagado de mentiras y hechos tergiversados (lo cual es corriente en la prensa oficial, un órgano de propagando más que un medio de comunicación auténtico), el artículo, firmado con el pseudónimo Jenofonte Superfosfatovich, insultaba a Poliakova en particular y a todos los defensores de los Derechos Humanos en general. El autor es, probablemente, el propio director del periódico, Pavel Yukubovich, al que excita sobremanera redactar panfletos bajo mútiples pseudónimos en contra de miembros de la sociedad civil, demócratas o cuqluiera que se oponga a la dictadura.

Incitación al suicidio

Atormentada física y moralmente, la joven tomó la decisión de suicidarse. Unos activistas de Derechos Humanos han anunciado que posiblemente se inicien un proceso criminal bajo el artículo 145 (“incitar a alguien al suicidio”). Pero esperara que policías brutales, un juez que emite sentencias políticamente motivadas y el director del mayor diario oficial del régimen sean, no ya encontrados culpables, sino siquiera acusados sería abiertamente naïve.
Yana Poliakova no es la primera víctima de la represión que se suicida. Incluso ha habido un caso de inmolación en 1998, cuando el abogado y activista de Derechos Humanos Alexei Filipchenko se prendió fuego frente al tribunal del distrito de Novopolock en protesta por la sentencia emitida contra su viejo cliente y la tiranía del sistema legal bielorruso. Murió de sus heridas unos días más tarde. También se suicidan ocasionalmente los jóvenes activistas acosados por los servicios especiales, a causa de las amenazas e intimidaciones de que son objeto.

Los órganos judiciales no están bajo el control de la sociedad civil. Como el sistema judicial y la Fiscalía no son independientes, emiten sentencias políticas. Están fuertemente atados al poder ejecutivo. Los prisioneros políticos bielorrusos señalan que una parte considerable de la población reclusa del país, está en prisión por razones políticas. Por ejemplo, el ex preso político Pasiukevich, agredido por un agente al ser detenido, pero encarcelado por “pegar a un policía”, estima que los presos políticos llegan al 5%. Esto parece irreal, pero mientras la Unión Europea presiona a Lukashenko para que libere a algunas figuras políticas reconocidas, miles de personas, ciudadanos corrientes, son encarcelados por el sistema legal injusto que florece en este país.

Imágenes: Moretones y pruebas de las palizas recibidas en el cuerpo de Yana Poliakova

http://www.lamiradaaleste.com/se-suicida-una-activista-de-derechos-humanos-en-bielorrusia-acosada-por-las-autoridades-por-aleg-pershanka-minsk/

https://humanpress.forosactivos.net

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